26 años (Donostia)

Es una experiencia alucinante ya que yo llevo 2 clases de 50 minutos y he notado un bienestar en toda regla, ya que, para empezar coges elasticidad bien sea en brazos y piernas y además relaja.

También he notado como si hubiera crecido un par de cm. no mucho paro se nota. Vengo del mundo del deporte, yo soy nadadora y os puedo asegurar que en la brazada nadando cualquier estilo se siente como que el agua fluye más, osea que vas más rápido y por mi experiencia parece que mejora el estilo, bien sea mariposa, espalda, braza y crol. Al principio yo creo que cuesta relajarse, pero una vez que dominas la técnica de la respiración te vas relajando. Para terminar iñigo es todo un profesional en su trabajo.

49 años (Donostia)

Llevo varios meses probando esta técnica….y desde el primer día fué sorprendente, ya que a nivel físico tenía una limitación en el brazo izquierdo a causa de un accidente desde hace más de veinte años y con dos sesiones el brazo lo levanto 100%

¡¡¡Ver para creer!!!

También se trabaja lo emocional y es como ir quitándote capas y sintiéndote liberada!!! Todo desde el Sentir!!! Gracias Iñigo por el formidable trabajo que estas haciendo. Os animo a que lo probéis ¡¡¡os sorprenderá!!!

64 años (Irun)

Una nueva experiencia digna de experimentar. Al terminar, vosotros mismos os sentis más elásticos y relajados; sin tensiones. No os sorprenda que os aparezcan recuerdos de algún mal, dolencia o accidente que hayais pasado, me ha sucedido a mí. Esta técnica, reequilibra el cuerpo y le devuelve la movilidad que antes tuvo. En síntesis, rejuvenece…  Buen trabajo Iñigo.

39 años (Trintxerpe)

Tumbándote de inicio la mente ya cambia de estado; el cuerpo se relaja sin esfuerzo y con los ejercicios que va indicando Iñigo el cuerpo va soltando bloqueos. En una sola sesión a mi me libero un dolor de cadera. Cuando sueltas los bloqeados tu actitud también es diferente ante la vida, con lo cual es sin duda una gran herramienta en manos de un gran profesor. ¡Lo recomiendo!

39 años (Irun)

Una experiencia que crea “adicción” a conocer realmente tu cuerpo y todas las posibilidades que este ofrece. Un descubrimiento que te adentra en un diálogo corporal contigo misma. Y que te lleva a querer repetir.

32 años (Irun)

Sinceramente he de reconocer que, siendo un tanto incrédulo respecto a este tipo de técnicas y viendo los resultados de gente conocida decidí probar ya que me interesaba recuperan la movilidad, recorrido y elasticidad perdida en diferentes partes de su cuerpo.

La primera sesión me sirvió para relajarme y quedarme dormido, ya que venía con estrés y la verdad que salí muy relajado.
La segunda sesión, ya vine algo más tranquilo y me relajé bastante también y algo más de elasticidad sí que recuperé sobre todo en la parte del cuello. Trabajamos el gluteo, entre otras cosas, y la verdad que muy bien, ya que pude estirarlo como otras veces no he podido.
En la tercera sesión sí que hubo un cambio en los gemelos; pasando estos a estar mucho más sueltos pero no sólo después de la sesión sino también con posterioridad.
En la cuarta sesión se trabajó la espalda, y yo que hago natación la notaba un poco cargada, pero la verdad no fui consciente de hasta que punto estaba mi espalda cargada de tensión hasta que haciendo diferentes movimientos con la hamaca y las correspondientes manillas, me pegó un pequeño calambre. Tras repetir el mismo movimiento de forma más lenta y suave, esa tensión desapareció.

Resumiendo, ir a Donosti desde Irun ya no supone para mí una pérdida de tiempo alguna como pensaba; sino todo lo contrario, una inversión en salud en corto, medio y largo plazo. Para prueba, desfilé el día de San Marcial y todos los años acabo con los gemelos destrozados, y al salir a la noche siempre me cambio el calzado por algo mas cómodo. Pues cuál ha sido mi sorpresa este año que, no sólo casi ni me han molestado los gemelos, sino que encima salí con las alpargatas para ver hasta dónde podía llegar los beneficios de la hamaca, y cierto es que los probé. Llegué más tarde que nunca y llegué a casa con mis piernas genial. Incluso al día siguiente al levantarme de la cama tenía mis gemelos muy bien. Es más, desde que he tenido contacto con la hamaca, ya no estiro después de hacer deporte para poder ver el poder de este invento, por inefectivo que pueda parecer.

46 años. (Donostia)

En la hamaca postural además de relajarme y ejercitar el cuerpo además de no cansarme o de no dañarme la rodilla operada mientras hago ejercicio, me ayuda a vaciar la mente mientras me concentro en los movimientos y hace que al final de los 50 minutos consiga quedarme en el vacío mental un buen rato. Y eso me carga de energía.

35 años (Donostia)

Si quieres estar en armonía con tu cuerpo, debes tener armonía en tus músculos:

– Un músculo no es fuerte si no es elástico.

– Un múscuko no es reistente si no es elastico.

Los dolores de espalda y cuello, y muchas patologías relacionadas con esta sintomatología proceden de excesiva tensión muscular que tira de los tendones y ligamentos de las articulaciones. Tenéis la gran suerte de conseguir éstos beneficios con el buen hacer de Iñigo, al que conozco personalmente y he tenido el placer de compartir experiencias y conocimientos en mi trabajo, el mismo que el suyo. En sus clases podréis disfrutar de su gran karma.

39 años Fisioterapeuta y Terapeuta Craneosacral en Donostia

Llevo un par de meses yendo a las clases grupales con Iñigo. Para mí es una hora a la semana en la que además de estirar todo mi cuerpo (me gusta correr y mi musculatura está bastante acortada) estoy plenamente relajada y disfrutando, del estiramiento e incluso de respirar liberando las tensiones acumuladas. No me suele gustar demasiado estirar pero en las clases lo haces casi sin darte cuenta, muy suavemente, tumbado, descansando y relajandote! Lo recomiendo a mis pacientes y a cualquier persona, tenga o no dolor. Es todo un regalo para nuestro castigado y muchas veces poco cuidado cuerpo.

48 años (DONOSTIA)

Como profesional del masaje y del mundo de las terapias, me gustaría compartir mi visión y experiencia con la técnica K-STRETCH. Aparte de que me parece increible, es una técnica sencilla que la trabajas de manera individual sin esfuerzo con la ayuda de la respiración que a mi parecer es la clave de la técnica.

Desde la primera sesión tomas conciencia de tu postura corporal, de las tensiones, rigideces y la relación que mantienes de forma inconsciente con todo esto. Maravilloso autodescubrimiento que vas desarrollando día a día, soltando y desbloqueando músculos, articulaciones y tensiones emocionales que se han quedado atrapadas en tu cuerpo y que les vas dando salida de forma sencilla a través de la respiración.

El trabajo que se hace es muy completo y no se fuerza nunca al cuerpo y esa clave es muy importante para mi, ya que uno mismo tiene la llave para abrir la caja de pandora. Lo recomiendo a todo el mundo y aprovecho para añadir que Iñigo dirige las clases con entusiasmo contagioso y su pasión por esta técnica la comparto y le doy las gracias.

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